“Cuando ella saltó”, una comedia atractiva


Con el debut actoral de Iván de Pineda y primera incursión en la pantalla grande de Lalo Mir, este film argentino se adentra en el realismo mágico urbano y no desdeña los personajes absurdos, lo grotesco y lo exagerado. Dirigida por Sabrina Farji, llega mañana a las salas de cine.

Por Héctor Puyo

El filme argentino "Cuando ella saltó", de Sabrina Farji, es el debut actoral del modelo Iván de Pineda, supone un saludable desvío del llamado Nuevo Cine Argentino y se estrena mañana jueves.

Con un pie en el estilo inefable empleado por los checos Vera Chytilova y Jiri Menzel allá por los 60 y otro en un realismo mágico urbano que no desdeña el grotesco y lo exagerado, narra lo que le sucede a un muchacho inmaduro (de Pineda) cuando es testigo involuntario de un suicidio.

Completan el elenco Andrea Galante, Juaqo Aguiar, Sandra Ballesteros, Leo Ramírez, Victoria Carreras, Ricardo Passano, Boy Olmi y Lalo Mir, quien también hace su primera y disfrutable incursión en la pantalla grande.

El chico ve morir a una bella muchacha (Galante), que es la que salta desde la terraza de un edificio, pero el guión no lo encamina hacia la tragedia sino a una agridulce búsqueda de los designios de la suicida.

Es que la chica deja una mochila con objetos personales, fotografías y una grabación con mensaje inquietante -en la que en ningún momento habla de muerte- y el muchacho intenta comunicarse con sus familiares.

La sorpresa radica en la hermana gemela de la difunta, también interpretada por Galante, con la que inevitablemente comienza a formarse un vínculo signado por la presencia de aquélla aunque en principio ninguno de los dos la mencione.

El encuentro le permite a Farji incursionar en esos ámbitos bizarros que ya mostró en la fallida "Cielo azul, cielo negro" (2003), porque la chica trabaja en un disparatado boliche de gitanos capitaneado por un excéntrico Boy Olmi.

Ese disparate abarca también la espera de un llamado Eclipse del Milenio, en la que una periodista televisiva (Victoria Carreras) pierde la compostura al apagarse las cámaras, y las veleidades del joven protagonista, que fracasa una y otra vez en "castings" para conducir un programa de videoclips.

Hay también personajes absurdos como el "Licenciado" de Lalo Mir, que trafica objetos en una plaza impecablemente vestido de blanco, y un anciano paralítico (Ricardo Passano) que sin embargo puede cortejar a su enfermera y bailar el vals.

La galería prosigue con un amigo y socio del protagonista (Juano Aguiar), un chico del interior con evidente indecisión de género (Leo Ramírez) y dos gordos violentos claramente inspirados en "Los hermanos Caradura".

Lo interesante es que en su primera película en solitario, Farji no se queda en la anécdota sino que utiliza las nuevas tecnologías para una saludable búsqueda formal en la que el color y las texturas tienen su fundamento.


Así, altera aleatoriamente algunos planos o parte de ellos, modifica fondos dentro de un mismo plano y viola con humor algunas convenciones narrativas, dentro de una liviandad saludable y con vestigios de cinefilia.

Parte de las virtudes del filme es el alto rendimiento del elenco, con Sandra Ballesteros, Ricardo Passano, Boy Olmi y Lalo Mir en convincentes personificaciones y una parejita joven (de Pineda-Galante) de muy buena química.
Fuente: Telam

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